En
este país nuestro que es España, tenemos, desafortunadamente a día
de hoy, una cultura acuariófila todavía escasa, en muchos casos mal
entendida y con un lastre de desinformación y fracasos muy grande.
En principio puede parecer un panorama de lo más negro, pero desde
hace unos pocos años a esta parte, el buen trabajo de criadores,
importadores, proveedores, comercios y de los propios aficionados, ha
hecho que esta situación se este dando la vuelta a gran velocidad.
El
acuario que nos ocupa tiene el honor de ser el primero. El primero de
la serie. El primero para casi todo el mundo, quien no ha tenido una
“bola de cristal” con su pez rojo y el primero en antigüedad,
dado que estos peces se remontan mucho tiempo atrás, su uso como
animal doméstico se remonta mas de mil años en su china de origen.
Al principio se cultivaban las variedades plateadas y negras, hasta
que unos cientos de años después se produjo la mutación a las
variedades “doradas”. Por supuesto hablamos del Carassius
auratus, La
carpa crucial es el animal que da origen a lo que hoy conocemos
vulgarmente como pez de agua fría, pez naranja, carpa de estanque...,
en definitiva al goldfish y sus variedades. A día de hoy hay más de
100 variedades reconocidas, pero no son tantas las que podemos ver en
los comercios especializados. Desde siempre, se tiene el concepto de
que se trata de peces duros, fáciles de mantener, capaces de
aguantar “cualquier cosa” y baratos. La realidad es otra bien
distinta. Existen variedades fuertes, fáciles de mantener si se les
dan las condiciones más o menos correctas, y muy económicas, pero
también existen variedades más frágiles, que necesitan unas
condiciones determinadas en cuanto a volumen y calidad de agua,
espacio y alimentación, que no hacen de ellas variedades “duras”
y cuyo precio no es nada económico, si bien estas últimas son más
difíciles de encontrar.
Las variedades más comunes de encontrar, sin entrar al detalle de
cada una, son los cometa, sarasa, shubunkin, Ryukin, Oranda, Ranchu y
telescopio, estas cuatro últimas en variedad de colores. Además
podemos encontrar con asiduidad variedades de Ojos de Burbuja, Ojos
celestiales, cabeza de león, Escama perla o Pompón, también en
múltiples variedades de color. Es importante recordar, que todas
estas variedades parten del mismo pez, aunque en algunos casos pueda
ser difícil de creer.
En mi caso particular, y como ya conté en la presentación de este
mismo blog, fueron los primeros peces que entraron en mi casa. Por
aquel entonces yo tenía apenas 7-8 años, y mis padres compraron,
siguiendo las indicaciones de una tienda especializada de mi ciudad,
un acuario de 38 litros con 5 peces “de agua fría”. Las
indicaciones fueron muy claras, les dijeron que no era necesario
filtro, que en ese acuario, con una simple bomba de oxígeno era
suficiente. También les informaron que podían meter hasta 10
animales, y que eran muy fáciles de cuidar. Solo tenían que cambiar
el agua de la pecera cada dos o tres semanas, y cada tres meses,
vaciar todo el acuario, piedras del fondo incluidas, y limpiarlo a
fondo. Mientras eso se hacía, los peces se metían en un enorme
tarro de cristal que teníamos en casa y después se devolvían al
acuario cuando todo estaba limpio. Eso si, era muy importante
utilizar un anti-cloro para el agua del grifo, que recuerdo que era
el Aquasafe de la casa Tetra, por que si no los peces podían morir.
Otra cosa muy importante era que tenían que dar de comer muy poco a
los peces. Apenas dos o tres escamitas por pez al día, y uno o dos
días a la semana dejarlos en ayunas...
Este último consejo, junto con la decisión de no poner más peces
fueron las claves para que los pececillos vivieran en mi casa unos
cuantos años, sin muertes, engordando y creciendo lentamente, hasta
que empecé yo con el gusanillo de los acuarios y a tener algo de
“conocimiento”, y los trasladé a un estanque donde vivieron, al
menos que yo sepa, un varios años más, no sin antes, haber cometido
la “tropelía” de mezclarlos con peces de “agua caliente” una
corta temporada.
“Una barbaridad”, creo que es la mejor forma de resumir las
condiciones en las que esos pobres animales tuvieron que
desarrollarse. Con el tiempo, empecé a leer todos los pequeños
libritos que las firmas comerciales dejaban en las tiendas para los
clientes, y a comprar libros de acuariofilia, libros que aun
conservo, y que explicaban como debían de mantenerse los acuarios.
Explicaban la importancia de un buen filtro, de los cambios de agua,
de limpiar el fondo del tanque para retirar la suciedad de la grava,
de controlar los valores químicos del agua, de mantener la
estabilidad en el medio, de la importancia de dar a los peces las
condiciones óptimas, tanto en valores de Ph, Gh, Kh, etc, como en
volumen de agua o alimentación.
¿como
debe de ser un acuario para goldfish?.
Empecemos hablando del volumen del tanque, sabemos que se trata de
animales capaces de llegar a los 15 cm y que son animales tragones,
que tienden a estar en continuo movimiento, por lo que deberíamos de
asignar si hablamos de animales de natación
lenta
(cola doble) entre 20
y 30 litros de agua por cada pez, si
bien es cierto que muchas fuentes hablan de 40 litros por animal y el
doble para animales de natación
rápida
(cola simple), hasta 80
litros por pez.
Particularmente, y aunque se que mucha gente puede no estar de
acuerdo conmigo, las variedades de cola sencilla como cometas,
sarasas y shubunkins, son animales que no metería en acuarios de
menos de 100-120 cm de largo y no las mezclaría con las de cola
doble. Primero por ser mucho más ágiles comiendo, lo que hace que
tengamos que dar mucha comida para que llegue a todos en la cantidad
adecuada, y después por que los rápidos movimientos de estos les
incomodan, especialmente a las variedades con visión reducida, como
Ojos de burbuja, ojos celestiales y telescopios, llegando en muchos
casos a mordisquearles las protuberancias oculares y destruyéndolas.
Lo que está claro es que a mas volumen de agua por pez, mejor. Así
pues, y teniendo en cuenta que no se trata de animales solitarios,
deberíamos de partir de
al
menos un tanque de
100 litros
brutos donde podríamos mantener entre 2 y 4 ejemplares, algo muy
alejado de esos criterios comerciales que a día de hoy siguen
imperando y que hacen que veamos como “tiendas especializadas”
venden bolas de cristal y acuarios de 15-20 litros con 4, 5 o más
peces, condenándolos a una muerte segura. No obstante, en el momento
que estos animales empiezan a desarrollarse con fuerza, nos daremos
cuenta que dos individuos de más de 10 cm, aunque cumplen el ratio de
40 litros por pez, se encuentran “estrechos” en un acuario de 100
litros, por lo que para animales alcanzando el tamaño adulto siempre
es recomendable pasar a tanques de más de 200 litros.
valores
físico-químicos del agua :
Otro factor a tener en cuenta son los valores físico-químicos del
agua. El rango de temperatura
de los goldfish es muy amplio, de hecho, algunos de los mejores
criadores de China están literalmente bajo un manto de nieve buena
parte del año. Sin embargo, aquí en condiciones de acuario se
sugieren valores entre 18 y 24 ºC asignándose un óptimo
en torno a los 22 ºC.
Yo en esto soy algo más escéptico, en general la temperatura no me
ha dado problemas por debajo de los 26-27 ºC,ni por encima de los
14-15 ºC, ni en acuarios interiores, ni en piscinas o estanques
exteriores, por lo que el rango puede ser más amplio, si bien si es
muy importante la estabilidad. No obstante y dado que se trata de
acuarios domésticos, lo ideal es una temperatura en torno a esos
22 ºC.
Los
valores químicos clásicos a controlar son Ph, Gh y Kh, no voy a
entrar ahora a explicar cada uno de ellos, pero si decir que al igual
que la temperatura, lo más importante es la estabilidad. Un rango de
Ph entorno al 7
(neutro)
, con un margen entre 6,5 y 7,5, aunque personalmente prefiero no
bajarlo tanto y dejarlo por encima del 7. El Kh debería de oscilar entre 5 y 8 para asegurarnos estabilidad y el Gh
en torno a 15
no nos dará ningún problema. Estos rangos son los que han
demostrado que los animales desarrollan, crían y crecen sin problema
alguno, yo he encontrado estanques a Ph 8,5, Kh 10 y Gh....me aburrí
de contar en 30, donde cometas y Shubunkins crecían y criaban....pero
no es lo que debemos de permitir en nuestro acuario.
Por
otro lado están los valores del ciclo del nitrógeno NH4/NH3, NO2,
NO3. Aquí es muy fácil, todo a cero. Las concentraciones de NH3/NH4
y NO2 siempre deben de ser de 0 mg/litro,
siempre, de lo contrario indicaría que lo estamos haciendo mal, que
nuestro filtro no es capaz de “consumir” toda la materia orgánica
que se genera en el acuario, ya sea por inmaduro, por pequeño, por
exceso de peces o por exceso de alimentación. El otro valor, el NO3
es más tolerable. Es el resultado del ciclo del nitrógeno y hasta
ahora solo era posible eliminarlo mediante cambios de agua, en
acuarios muy plantados, estas se encargan de consumirlos, pero en un
acuario de goldfish no pasará. Lo ideal sería que el NO3
no pasase nunca de 25 mg/litro.
Si bien a esos valores, ni siquiera a más del doble es toxico para
nuestros goldfish, si nos acarreará otra serie de problemas de
mantenimiento como la aparición de algas.
Decoración:
El
siguiente punto a revisar es la decoración del acuario. Esto es
siempre muy personal, pero existen unos condicionantes de obligado
cumplimiento. Para empezar se trata de animales que gustan de nadar,
por lo que el acuario no debe de estar saturado de objetos que les
resten agua y espacio. Hemos de tener en cuenta que se trata de
animales que lo mordisquean prácticamente todo, por lo que deberemos
de tener en cuenta no utilizar rocas o elementos afilados o gravas
que puedan producir cortes. Ademas, al igual que en la gran mayoría
de acuarios evitaremos por todos los medios la introducción de rocas
alcalinas o conchas que puedan provocar cambios en la química del
agua, y de maderas sin tratar. También recomendaría una grava de
grano medio, entre 2-3 mm. Aquí es fácil encontrar variedad y calidad
Os dejo un enlace fantástico donde aparece un acuario y 27 tipos de
gravas. La virtud del enlace reside en que pinchando sobre cada una
de las gravas, esta aparece en el acuario representado permitiéndonos
ver el efecto exacto.
(
http://www.aquatic-nature.be/dekoline2.html
) . El colocar plantas naturales o no, dependerá del gusto personal,
si bien se ha de tener en cuenta que se trata de peces omnívoros,
que casi con toda seguridad las devorarán casi todas. Por último,
un ejemplo de acuario para Goldfish diseñado por la gente de ADG,
que , a mi particularmente, me encanta, sobre un acuario ADA 120-H de
324 litros.
Sistema
de filtración:
Ya hemos comentado que se trata de peces tragones y grandes, por lo
que para nuestro acuario de 100 litros lo ideal es utilizar un buen
filtro externo. En el mercado podemos encontrar multitud de marcas y
modelos que siempre se referencian en función del volumen del tanque.
Lo ideal es un filtro con el mayor volumen filtrante que encontremos
y un caudal de al menos 4 ó 5 veces el volumen bruto del tanque por
hora, es decir, entre 400 y 500 litros/ hora. Nos daremos cuenta que
los filtros que recomiendan las marcas, siempre son un poco justos
para el volumen requerido, por lo que yo prefiero siempre fijarme en
los datos de caudal y volumen, que son los que al final me van a
marcar si son aptos o no para mi acuario. Por dentro deberemos de
tener una buena filtración biológica por medio de material adecuado
y de gran superficie de colonización bacteriana como por ejemplo el
Sera Siporax, el Bio Ring de Aquatic Nature o el Substrat pro de
Eheim, y una filtración mecánica también de calidad por medio de
perlón o foam de las diferentes casas comerciales. Es importante no
dejar que el filtro se sature de suciedad e ir renovando la parte
mecánica conforme veamos que el caudal del filtro se reduzca, y
evitar que la manipulación del filtro coincida con el cambio de
agua.
(Imágenes de las páginas oficiales de las marcas. www.eheim.de/es
; www.sera.de/es
; www.aquatic-nature.be
)
Iluminación:
Hay poco que decir. Realmente con unas 6-8 horas de luz al día es
suficiente. Todo dependerá si nuestro acuario esta habitado por
plantas o no. En el caso de tener plantas, les debemos de ofrecer
entre 8 y 10 horas de luz al día, pero debemos de evitar plantas de
hoja tierna, pues estos pequeñines no dejarán nada en pie. Así
mismo, los goldfish no gustan de una luz muy intensa por lo que con
menos de 0,25 w /litro estarán muy a gusto.
Compatibilidad:
¿Existen especies compatibles con los goldfish?. Si, claro, pero lo
ideal es mantenerlos solos. La mayoría de las especies que te venden
como compatibles provienen de aguas ácidas, como pueden ser las
coridoras y plecos, o bien en otros casos nos invitan a introducir
cobítidos como el Cobitis
taenia o
el
Misgurnus fossilis
o especies como el Mixocyprinus
asiaticus,
y aunque pueden adaptarse, estamos tratando de hacerlo bien. Queremos
lo mejor para nuestros peces, así pues, evitemos introducir otras
especies
Por último, y no por ello menos importante, hemos de
resaltar, que, de nuevo debido a su metabolismo y voracidad, hemos de
proporcionarles cambios de agua regulares, de al menos un 20-30%
semanal, que podrá verse aumentado en función de los valores de NO3
que tengamos en el agua. No obstante, con esta rutina de cambios de
agua los valores de NO3 deberían de rondar los 0-10 mg/litro, de no
ser así deberemos de revisar la cantidad de comida que damos a los
animales, o si tenemos más habitantes de los que debiéramos.
En resumen, los goldfish son tratados dentro del mundo
acuariofilo, como peces para principiantes, peces para niños o
estanques, sin embargo se trata de animales vivaces, con increíbles colores, muy decorativos en acuarios cara al publico y muy reactivos
a la persona que los cuida. Son muy longevos y en las condiciones
adecuadas fáciles de mantener, lo que hará que podamos disfrutar de
ellos durante mucho tiempo.